sábado, 4 de abril de 2015

BELLO PUERTO

En el centro de Polanquito, se encuentra un lugar con mucho movimiento.. el BELLO PUERTO.
Negocio de comida especializado en pescados y mariscos, y con mucho éxito, pues las largas esperas para entrar así lo demuestran.

Entramos, con un poco de resistencia, habiendo tenido un primer mal contacto al hacer la reservación, solicitada a las 3:00 pm, pero nos informaron que máximo a las 2:30 y con tristes 10 minutos de tolerancia, a lo cual tuvimos que acceder.

El lugar, prácticamente todo pintado de blanco, con tonos de colores muy vivos y variados que le dan alegría al local, logrando un ambiente de puerto.. de mar.
La música, agradable, de acuerdo al concepto.. música latina, de diferentes tipos y ritmos, pero que permean bien con el concepto. Sin embargo, un poco mas tarde, empezó a sonar pop en ingles, que si bien, era una buena selección, pierde la idea.

La mesa es  de maderas blancas, de nueva cuenta, dando un toque muy de puerto al ambiente. Al centro ponen una canastilla (que rellenan constantemente (aplausos)) con salsas embotelladas de Habanero, búfalo, etc... mas dos salsas: verde y roja, hechas en casa que están estupendas tanto en sabor como en picor. Todo coronado con tostadas.

Como lo he comentado en otras ocasiones, el punto bajo a mi sentir, es el usar servilletas de papel genéricas, de las mas baratas del mercado. Entiendo que esto se pudiera retomar como parte del concepto, PERO vamos, es un lugar que de ninguna manera es barato y se agradecería cuidaran ese detalle, al menos con una servilleta que tuviera el logo del negocio, algo que me dijera que estoy obteniendo algo mas de valor por mi dinero (como ser verá en el menú un poco mas adelante) 


Los meseros, son un poco tardados en su tarea, pero con disposición y amabilidad, de cualquier manera y afortunadamente hay un par de capitanes (o Gerente?) que de vez en vez se acercan a ver si todo marcha bien. Mucho mas de lo que sucede actualmente en los restaurantes de la Ciudad de México.

Nos entregan una carta de bebidas, corta pero interesante, que cumple su propósito.
La de alimentos cuenta con un formato correcto, suficiente espacio, tipo y tamaño  de letra muy adecuadas, teniendo además la fortuna de remarcar los platos  "especiales" y/o las recomendaciones. En resumen, nada que reprochar, se agradece principalmente que se siga manteniendo el estilo usual de una carta, y no la hoja de papel impresa y anexada en una tabla de madera. El detalle grave que se encuentra es el estado de las mismas, ya que están muy desgastadas y demeritan bastante. 
Aunque siendo honestos, tampoco nada para cortarse las venas.

La comida, fue "in crescendo".. pues pedimos de entrada unos taquitos (3 pzas) de Machitos de pulpo, que francamente estaban bastante regulares, pues estan demasiados carbonizados y se pierde el sabor de la proteína principal.

Sin embargo, de plato fuerte se pide el Huachinango Zarandeado, que está francamente muy bien sazonado. El mesero tiene la fortuna de ofrecer traerlo abierto en mariposa o ya fileteado.  Excelente platillo, aunque, el prietito, justamente es en el arroz que finge como guarnición, que les queda, diría yo bastante mediocre. Sin sabor ni consistencia,

Así mismo, y a pesar de la mala experiencia con los tacos de pulpo, pedimos el Pulpo Chamuscado, y este supera las expectativas con honores pues además de ser una porción generosa, están perfectamente braseados y glaseados, dando un excelente sabor al molusco. El detalle vuelve a ser la guarnición, que son unas papas cambray, bastante tristes.

Los postres, pasan sin pena ni gloria, un flan de cajeta carente de personalidad, sabor ni textura y unos plátanos fritos que no merecen mayor comentario.


De cualquier manera el saldo es bastante favorable, y sin duda regresaremos a probar otros de estos platillos, posiblemente en otra de sus ubicaciones.

Buen provecho.